Una asociación de cultivos es un grupo de especies que se siembran juntos en un área o región específica. Esto puede deberse a una variedad de razones, como optimizar el uso de recursos (por ejemplo, agua, suelo, luz solar) o maximizar los rendimientos.

Hay varios tipos de asociaciones de cultivos, incluyendo:

Cultivo intercalado: este es un tipo de asociación de cultivos en el que dos o más cultivos se cultivan juntos en el mismo campo o jardín. Esto se puede hacer para optimizar el uso de los recursos o para aprovechar los patrones de crecimiento complementarios (por ejemplo, un cultivo que crece alto y otro que crece cerca del suelo).

Cultivo rotativo: este es un tipo de asociación de cultivos en el que los cultivos se cultivan en una secuencia específica durante un período de tiempo. Esto se puede hacer para mejorar la fertilidad del suelo, controlar plagas o aprovechar los diferentes requerimientos de nutrientes de diferentes cultivos.

Siembra asociada: este es un tipo de asociación de cultivos en el que ciertas plantas se cultivan cerca unas de otras para proporcionar beneficios mutuos. Por ejemplo, algunas plantas pueden ayudar a atraer insectos benéficos o disuadir a las plagas, mientras que otras pueden brindar sombra o apoyo a otras plantas.

Las asociaciones de cultivos pueden ser una forma eficaz de optimizar el uso de los recursos y mejorar el rendimiento de los cultivos en un entorno agrícola. También se pueden usar en jardines domésticos para crear un ecosistema más diverso y resistente.